El Programa de Transición a la vida Adulta lo conforman 8 adolescentes con discapacidad intelectual que en las sesiones semanales que planifican 3 técnicos de apoyo de ASPAPROS, realizan actividades que promueven la adquisición de aprendizajes funcionales para el pleno desarrollo e inserción en la comunidad con el objetivo de mejorar su calidad de vida y la de sus familias.
Dichas actividades son muy variadas, entre ellas destacamos:
- Habilidades de autocuidado.
- Control de emociones y frustraciones.
- Habilidades sociales y en comunidad.
- Bienestar físico.
- Manejo del euro.
- Autodeterminación.
El Grupo de Transición a la Vida Adulta se despide hasta el curso que viene, para despedir el curso, el grupo se fue a pasar un fin de semana a Mojacar. En sesiones anteriores los participantes organizaron toda la «logística» que necesita una escapada de fin de semana: prepararon itinerarios turísticos, reservaron el hotel, prepararon las maletas, etc.
El viernes a las 17:00 salieron desde la sede social camino a los Apartahoteles Best Mojacar Pueblo Indalo. Una vez ahí, se acomodaron y dieron una vuelta para ver las instalaciones del complejo.Cenaron temprano para poder ver el partido de España en una cafetería y después disfrutaron de la animación con música y bailes hasta la madrugada.
El sábado por la mañana tomaron rumbo a Mojácar pueblo, donde teníamos cita en la oficina de turismo y Elisa, nos explicó los sitios más emblemáticos y nos contó cosas muy curiosas del pueblo, como el origen de las mojaqueras. Les hizo entrega a todos de un indalo y un plano del pueblo y se dirigieron a recorrer las calles y disfrutar del paisaje. Después de un paseo viendo el mirador del Castillo, punto más alto del pueblo, se tomaron un refresco y después disfrutaron de una comida italiana a base de pizzas en una terraza de la plaza. Tras el almuerzo, se fueron a disfrutar de la piscina y las actividades acuáticas del hotel hasta las 8 de la tarde que se ducharon y arreglaron para la cena de gala y después disfrutar de la animación y la música así como de los juegos recreativos que había allí. Se acostaron de madrugada y al día siguiente domingo, desayunaron y recogieron sus cosas para tras despedirse del hotel, ir a la playa de Garrucha y comer allí, antes de nuestro regreso. A las 5.30 de la tarde estaban en la sede despidiéndose hasta octubre que se volveran a ver con nuevas actividades en nuestro programa.
