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La misión de las organizaciones que, como ASPAPROS, trabajan por la inclusión de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo, se sustenta en la prestación de los apoyos que cada una de ellas necesitan, para promover su autonomía y autodeterminación en el recorrido de su proyecto de vida.
Aunque muchas de las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo consiguen gobernar sus propias vidas, también son numerosos los casos de aquéllas que no consiguen prever las consecuencias de sus acciones u omisiones. Para ellos, el ordenamiento jurídico cuenta con un mecanismo de protección y apoyo a través, respectivamente, del procedimiento de Modificación de la Capacidad y de la Tutela. Queda claro que el segundo es consecuencia del primero, constituyéndose en el artículo 222 y siguientes del Código Civil, como un deber que se ejerce en beneficio del tutelado, siempre bajo la supervisión de la autoridad judicial.
La Tutela es por tanto, un apoyo más a la autonomía de la persona que debe prestarse solamente cuando sea necesario. Su ejercicio abarca dos dimensiones; la personal y la patrimonial, quedando la segunda (conjunto de actividades relacionadas con la administración de los bienes del tutelado), supeditada a la primera para la mejora de la calidad de vida de la persona receptora del apoyo. Los padres y familiares, salvo evidencia en contra, deben ser los primeros llamados a ejercer la patria potestad o la tutela, recayendo el ejercicio de esta última en una fundación tutelar, sólo de manera subsidiaria, limitándose a aquellos casos en los que la persona se encuentre en situación de desamparo familiar o social.
El objetivo de una fundación tutelar es pues, prestar los apoyos que necesita cada persona, cuya capacidad ha sido revisada o modificada por sentencia judicial, para gobernarse personal e individualmente, promoviendo la mayor autonomía, autodeterminación y recuperación de su capacidad jurídica. Estas personas, al encontrarse en situación de vulnerabilidad, precisan de alguien que vele por sus intereses y les acompañe en su proyecto de vida, siendo ahí donde se enmarca el apoyo tutelar que ofrece la Fundación Tutelar ASPAPROS. Se trata de un servicio social que es encomendado judicialmente, constituyéndose en alternativa al apoyo de sus familiares, ejerciendo dicha tutela de una forma profesionalizada, cuando éstos no pueden o no son considerados idóneos por el juez.
En ASPAPROS consideramos poco acertadas las opiniones que, basadas en una supuesta incompatibilidad ética, desaconsejan que entidades prestadoras de apoyos a las personas con discapacidad intelectual, como la nuestra, se conviertan al mismo tiempo en tutores, a través del instrumento de una fundación tutelar cuyos patronos están vinculados a la propia organización. Dicho argumento queda en evidencia si, especialmente desde un punto de vista ético, entramos en el análisis práctico. Según nuestro criterio, adquiere plena justificación la opinión contraria cuando, llegado el momento, alguien debe tomar la iniciativa de proponer los trámites que conduzcan a una resolución de incapacitación, ante casos de personas sin familias o con familias desestructuradas de las que, en definitiva, no se puede esperar que adopten ninguna decisión exigente respecto del futuro de su familiar. Entonces, ¿quién mejor para hacerlo que aquéllos que tienen contacto directo con la persona con discapacidad y la conocen tanto a ella como a sus circunstancias?; ¿quién mejor que aquéllos que vienen guiándose en su conducta para la prestación de apoyos al ulterior tutelado, en principios éticos claramente contrastados?; ¿alguien puede sostener que entidades ajenas al entorno en que vive la persona con discapacidad cumplirían mejor con su función tutelar?. La experiencia, en nuestro caso, nos ha venido demostrando que no es así.
Si las dudas proceden del temor a supuestas malas prácticas de fundaciones tutelares vinculadas a las entidades, frente a la conducta intachable de aquellas que no lo están, dicha posición nos causa asombro, por cuanto se trataría en todo caso de malas prácticas personales que nada tienen que ver con las organizaciones, al tiempo que no entenderíamos, en cambio, como se confía en las primeras para la prestación del resto de apoyos que necesitan en su vida diaria. Aunque creemos que se trata de una posición minoritaria, sólo podremos combatirla con la máxima trasparencia en la gestión que siempre vendrá avalada por la preceptiva fiscalización de la gestión patrimonial del tutelado, a cargo de la autoridad judicial. A lo largo de los últimos veinte años, hemos instado la declaración de incapacitación de un número significativo de personas a las que apoyamos en nuestros centros, habiendo sido designados por la autoridad judicial, tutores de algunos de ellos. El cambio operado en su calidad de vida, en la de todos ellos, ha sido espectacular y no cejaremos en nuestro empeño por hacerlo extensivo a cuantas personas puedan necesitarlo.

Un año más ASPAPROS pone a disposición de todos sus socios, clientes y familiares, trabajadores y amigos en general un número de la lotería nacional de navidad del próximo 22 de diciembre de 2019 al precio de 23 euros, 20 euros de coste del décimo y 3 euros como donativo solidario que la asociación destinará a ampliar su acción social en pro de las personas con discapacidad intelectual y sus familias.

Resérvalo antes de que se agoten llamando al 950 22 30 31 y suerte para todos.

En sí mismo la conmemoración de su 10º aniversario y los 25 números de la Revista ASPAPROS, no hace a la Revista ni mejor ni peor en comparación con otros cumpleaños inmediatamente anteriores y posteriores, pero resulta una ocasión privilegiada para recapitular sobre lo conseguido, celebrar su salud editorial y posicionarnos frente al futuro. Aunque es pronto y tendremos que esperar todavía para un estudio sociológico sobre el papel desempeñado por la Revista ASPAPROS en el mundo de la discapacidad intelectual y su impacto social más allá de la propia asociación, pero algo había que hacer para resaltar la efeméride. Un aventura de 10 años que hoy nos permite disfrutar de una publicación consolidada editorialmente y consolidado prestigio entre los grupos de interés de la asociación.

La Revista ASPAPROS comenzó su andadura en el 2009 bajo la denominación InfoASPAPROS con el objetivo de ser el boletín informativo de la asociación y mantener informados a los grupos de interés, además de abrir una nueva ventana a la sociedad almeriense que diera a conocer tanto la labor de la asociación como la realidad, necesidades y demandas de las personas con discapacidad intelectual y sus familias. Hay que recordar que por aquella época el uso de las redes sociales no estaba muy extendido, las páginas web no eran tan atractivas y dinámicas como ahora y el uso del correo electrónico entre nuestros clientes era marginal, por lo que InfoASPAPROS era una herramiento eficaz para llegar donde el boca a boca no lo hacía y para disponer de libertad comunicativa evitando el filtro de los medios escritos.

Los comienzos fueron difíciles, partíamos de una experiencia previa que había resultado insatisfactoria, con un gran desconocimiento sobre herramientas de maquetación y periodismo pero con la ilusión de ser los narradores de la historia de ASPAPROS. 

Si un valor ha caracterizado la edición de la Revista ASPAPROS desde sus inicios ha sido el trabajo en equipo, en cada número han participado muchas personas poniendo su granito de arena en cada una de las etapas, desde la elaboración, hasta su difusión y reparto.

La Revista tenía una frecuencia de publicación trimestral hasta que en el año 2015, se decidió disminuirla a semestral, con el objetivo de dar un tratamiento más amplio y detallado a los contenidos. El número de páginas también ha ido creciendo a lo largo de los años, pasando de 4 a 8, luego 12 y en la actualidad 16 páginas. 

En la constante evolución de la Revista ASPAPROS se han subido tres grandes escalones, que nos han llevado de un formato de boletín informativo, que como su propio nombre indica tenía como principal objetivo informar, a otro de revista en la que las entrevistas y la opinión tiene un espacio preferente.

En el actual formato hay varios aspectos que consideramos fundamentales y que marcan el carácter de la revista. El más fácilmente identificable es la portada, siempre dedicada a una persona con discapacidad intelectual en primer plano, lo que supone toda una declaración de intenciones, poniendo de manifiesto cuál es nuestro único leitmotiv. En la tercera página encontramos la editorial, en la que se analiza y opina sobre temas relacionados con la actualidad de la discapacidad intelectual, no con la pretensión de sermonear a nadie, sino más bien dirigiéndonos al corazón de nuestros lectores con un mensaje exhorte a la defensa de derechos y a la inclusión. Queremos ser un ejemplo para construir una sociedad mejor y en el campo de la accesibilidad no podía ser una excepción, cada una de las noticias de la revista están disponibles a través de lectura fácil. De este modo no solo hacemos más accesibles los textos, también inspiramos para que otros sigan nuestro ejemplo.

No podemos pasar por alto el laborioso reparto de los 1000 ejemplares que se imprimen en cerca de 100 puntos de difusión, lugares como hospitales, centros de salud, delegaciones territoriales de la Junta de Andalucía, dependencias de los ayuntamientos del área de influencia y Diputación de Almería, colegios y empresas.

Queremos agradecer públicamente el apoyo y compromiso de todas y cada una de las empresas y firmas patrocinadoras de las Revista ASPAPROS. Sabemos que compartís nuestros valores y principios y deseamos fervientemente que vuestra aportación a esta revista os haya generado un valor añadido.

Deseamos seguir mejorando en lo posible la calidad de la revista, prosiguiendo su adaptación a los requisitos más exigentes e incorporando a nuevos lectores. Pero en eso andamos todavía, a la vez que auguramos muchos más cumpleaños por delante a la Revista ASPAPROS para poder celebrarlo.

Un nutrido grupo de personas de ASPAPROS y la Asociación de Voluntarios de la Caixa de Almería han disfrutado de una velada en la feria de la capital almeriense.

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ASPAPROS continúa su esfuerzo para que las personas con discapacidad intelectual de los centros residenciales de la asociación tengan una plena inclusión social a través de su presencia en todos y cada uno de los espacios de su entorno de la forma más normalizada posible, dentro de lo cual no podían faltar los actos celebrados con motivo de la Feria de Almería.

El servicio de ocio ha organizado múltiples visitas y salidas durante todos los días que ha durado la Feria de Almería para que las personas de ASPAPROS disfrutaran de las fiestas municipales como cualquier almeriense. Como cada feria de Almería desde hace diez años, un nutrido grupo de voluntarios de la Asociación de Voluntarios de la Caixa de Almería pasa una noche de feria con todas las personas con discapacidad intelectual de ASPAPROS que lo desean. Para ello la asociación de Voluntarios de La Caixa pone a disposición de la asociación el transporte para el desplazamiento e invitan a cenar a los asistentes, pero sobre todo comparten un tiempo magnífico de hermanamiento con el grupo de ASPAPROS, bailando, chalando, riendo,…

Desde ASPAPROS queremos poner en valor la acción social de la asociación de voluntarios de la Caixa, que través de su labor crean lazos de amistad y fraternidad con las personas con discapacidad intelectual de ASPAPROS.

En abril de 2019, el Comité sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad publicó un informe muy crítico sobre la situación en España. Plena inclusión España ha adaptado a lectura fácil el informe, cumpliendo así una de las recomendaciones del propio comité: la difusión de dicho informe en formatos accesibles.

En su informe sobre la situación en España, el Comité destaca la importancia de todas las aportaciones, pero especialmente las relacionadas con el artículo 17, que habla de las esterilizaciones forzadas, y el artículo 24 sobre la educación inclusiva por considerarlas como urgentes.

Además, desde Plena inclusión destacan ocho temas más:
1. Las personas con trastorno mental deben considerarse personas con discapacidad.
2. No se debe usar dinero público para construir instituciones.
3. Hay que prohibir la sustitución en la toma de decisiones. Una persona sin discapacidad no puede tomar decisiones por una persona con discapacidad.
4. Hay que prohibir que te metan en una institución a la fuerza. Hay que prohibir las contenciones involuntarias.
5. Hay que hacer una ley sobre el derecho a la asistencia personal.
6. En España, no se cumple el derecho de acceso a la justicia para las personas con discapacidad intelectual. La justicia debe ser accesible.
7. Hay que poner fin al copago.
8. Las elecciones deben ser accesibles.